Los hackers que se metieron al sistema de la FIA... pero solo para “ayudar”

Hackers entraron a la FIA, vieron todo y avisaron. Dicen que fue “por seguridad”. Unos santos digitales.

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Los hackers que se metieron al sistema de la FIA... pero solo para “ayudar” (guiño, guiño)

En una historia que parece sacada de una mezcla entre Rápido y Furioso y Mr. Robot, tres muchachos con tiempo libre y ganas de jugar a los héroes digitales irrumpieron en el sistema de la FIA y accedieron a los datos personales de todos los pilotos de Fórmula 1. Pero tranquilos, no fue para vender los datos ni extorsionar a nadie —no, no—, fue por el bien de la humanidad.

Según contó el usuario @galnagli en X (sí, Twitter, pero con nombre de shampoo), él y sus dos amigos se metieron al sistema solo para “testear la seguridad del ecosistema”. Porque claro, ¿quién no se levanta un día y dice: “che, me pinta ver si puedo entrar al sistema de la FIA y convertirme en administrador”?

El trío logró acceder a toda la información personal de los pilotos, incluyendo los documentos de Max Verstappen, su superlicencia y hasta su currículum (que imaginamos dice “romper récords y rivales desde 1997”). Pero tranquilos: aseguran que no descargaron nada, no sacaron provecho y que apenas se dieron cuenta de la vulnerabilidad, avisaron a la FIA. Todo muy scout, muy “de corazón noble”.

“Nos llevó diez minutos encontrar la falla”, contaron, como quien dice “me tardé menos en hackear la FIA que en calentar el agua para el mate”. Eso sí, aclaran que no guardaron nada y que borraron todo. Hasta su cuenta de administrador, que debe haber durado menos que una parada en boxes de Red Bull.

La FIA, mientras tanto, emitió un comunicado con toda la elegancia burocrática posible: “Hemos tenido conocimiento de un ciberincidente”. Traducción: “Se nos metieron hasta la cocina, pero ya lo tapamos con cinta scotch y un mail a IT”.

Por suerte, el incidente se resolvió rápido y sin daños. Aunque más de un piloto debe estar revisando que su pasaporte no termine en Mercado Libre.

En conclusión: tres hackers entraron, vieron y avisaron. No robaron nada, no pidieron rescate y, de paso, le hicieron un test de seguridad gratis a la FIA. Unos genios. Si esto sigue así, los próximos en “ayudar” van a ser los que hackeen Netflix “solo para ver si anda bien el login”.